Tres poemas de Daniela Becerra Romo (México)

Daniela Becerra Romo (Ciudad de México, 1968). Desde niña se refugia en las palabras leídas o escritas. Ha publicado en Literal Magazine, Nagari, Escritoras Mexicanas, Reforma, El Financiero, Harpers Bazaar y Elle, entre otros medios. Editó Alcanzar el vuelo. Responsabilidad social en las empresas, publicado por Cemefi. Aunque siempre quiso estudiar Letras, es licenciada en Comunicación y cursó la maestría en Desarrollo Humano en las organizaciones. Hoy co-edita la publicación digital Anfibias Literarias y forma parte del grupo de “Escritoras peligrosas”. Ha participado en la Antología, volumen III de la Feria del Libro de NYC 2023, la antología de poesía Mujeres del mundo uníos y es coautora de los libros Palabras entrelazadas y Calladas palabras.

*

Imploro luz las 24 horas

1.
Las llamadas de madrugada sí existen
Rasgan el tiempo
Extienden la noche negra y su silencio

2.
Un ¡Mamá! a kilómetros de distancia
           tristeza teñida de impotencia
                             Estrellas de angustia en mi cielo

3.
Hablo con la médica de urgencias
Hematoma del septum
Multifractura nasal
La luz del amanecer me protege

4.
Decisiones
Planes cancelados
Recorro kilómetros
Cirugía urgente
                                Atardecer tembloroso

5.

Noche de nuevo                                         Tengo miedo de cerrar los ojos                             

                         Mis alas se han roto incapaces de protegerte

Y sin embargo las extiendo

*

Anestesia

Las venas trazan mapas ocultos. Tres piquetes fallidos para marcar territorios.
Intentas exhalar cinco miedos atorados en el pecho.
Las manos entumidas, los labios transparentes.
El abismo invita. ¿Desmayarse en una cama de hospital? La respiración sostiene.
Paredes líquidas, oleaje que amenaza. Mantas azules, nubes que no arropan.
Hace frío en el quirófano. Los Rolling Stones, de fondo. She comes in colours everywhere… Buscas en vano una mirada cómplice y sonríes mientras desapareces entre los acordes de Keith Richards.
Un paso mental te hunde en la niebla.
                 Nadie te vio cruzar la frontera.

*

¿A qué hora despiertan los mirlos?

   Silencio
Todavía duermes

Espero el amanecer
          siguiendo el vuelo de los que van despertando

Las emociones se columpian
Plumas negras de hartazgo

Tatuajes callados bajo las batas blancas

Otra dosis de antibiótico
Un piquete más, te dicen
Ya quiero irme a casa, suplicas
Tomo tu mano mientras las certezas se me agrietan
El mirlo canta

                        La añoranza aletea

*

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