
TRES RIBERAS
I
Verdad
jamás collarcito
ni trama a considerar
a trasluz
de lo permisible
verdad ES —presencia elemental—
el mar entra
sin pedir permiso.
II
Con la voz en ayunas
pisar descalza
cascando el sinfín
de la insinuación hiriente
ventilar la casa
que el soplo penetre y mantee
el semblante de la pelusa alambrada
en lo brutal.
III
Manar
en silenciosa caída de pestaña
o de rodillas
como la lluvia.
***
Verónica Durán González (1983) alias MujerCiervo. Ilustradora gallega, autodidacta. También escribe. Sus pasos han sido publicados en Por qué tiemblan, en la revista digital de difusión literaria, Obituario y en el fanzine orquestado por Inés Martínez, Seremos Onironáutas. Hija de marinero, cuida la ancianidad del padre y alza su casa de letras en el rayar del día sobre un peñasco Atlántico.